domingo, 10 de julio de 2011

Ni siquiera huele a mariguana.

Era inhabitable, esa noche se acostó, y perdidos en la bahía de las sabanas, pude sentir sus brazos rodeándome completa .
Podía sentir los latidos de su corazón, el sonido de su respiración, su olor  que penetraba en mis tejidos.
El ambiente era blues, y sus labios inalcanzables, rozaron la tela que apenas me cubría.
La noche, el silencio profundo, insoportable.
Esa noche supe que seriamos  cómplices de momentos de intimidad, de sus sueños, que poco a poco  se iban haciendo míos, embriagada por sus ideas.Sueños que me desgarraban, sus pesadillas me aterraban, sus lagrimas me empapaban de angustia, de aveces solo tener que sentirlo en silencio.
Todas las noches me hacia suya entre sus brazos ardientes y sensibles, me apretaba como si quisiera  hacerme el amor hasta desvanecerme.
Aliento a alcohol, ¿Cuantas veces hará lo mismo? ¿Cuantas veces debo fingir  que no me importa?
Agobiada, ansiosa con las entrañas ensangrentadas de felicidad por que ya esta aquí.
Enamorada...
Abandonada por segundos eternos que carcomen mis entrañas. Carcajadas a lo lejos, humo de cigarro, tragos dulces...mariguana.
El atardecer dorado en su piel, huele a papiros mojados en la primavera.
Me asfixia. Olvido quien soy.
Estoy a su alrededor de tal forma que no me importa,por que no hay nada mas que el alrededor de su voz.
La compañía, soñar despierta, el terror de sus ojos al despertar.
Pánico: ¿cuando existo?
No esta el.
Pánico de nuevo. Hay silencio.
He aprendido la forma de desafiar los silencios y hacer una danza con la mente.
Patética: sentada en su cama buscando la respuesta entre mis dedos.
Carcajadas,adrenalinas sustanciadas,humo de cigarro, tragos dulces, mariguana.
Solo hay una cosa que nos une: madrugada.
El acordeón de un tango arrulla la luna gorda y bastarda que arropa las aguas... el duerme.
Su silencio: Nitidez perversa de nostalgia y de repente, me abraza.Llevo los dientes apretados para que se me salga el corazón.
Lo siento como distante, siempre hay silencio disfrazado con el sonido de su música.
Sobrevivimos al olvido, estando juntos.
En silencio profundo, pero con una estridencia que engaña la vista, al mirarlo a la lejanía el piensa en ella.
Felicidad constante, rechinar de dientes.
No hace nada, solo me arrastra a su cuerpo cuando no esta ella.
Sin querer, los observe un día, ellos entraron, yo me hice la dormida escondida entre sus sabanas,desnuda, esperando sentirlo de nuevo, como siempre fue.
El hacia toda clase de esfuerzos por reducir la distancia, y ella  no dio un solo paso que fuera en sentido contrario.
Su silencio se elevaba hasta ellos como vapor letal.
Se desvanecieron en la temperatura del silencio.
Sudor, cuerpo caliente, orgasmo indefinido.
Grito de placer que calla por un momento el sufrimiento de la humanidad.
Suspiros...
Se miran y segan  la preocupación por un momento.
Quería matarlos!, asesinarlos con cada estruendo en sueños que se guardo e mi interior con los sueños de el.

Lucha interior.

Solo escuche: Besame otra vez.

Poco a poco aprendo a difuminar la realidad,fingiendo que me divierte su molesta carcajada.Prefiero danzar en  el silencio que le rodea.
Por que todas las noches me abraza, me acaricia con deleite, no sobreviviría sin el rose de su piel,pareciera como si en verdad me amara.
Ellos manejan el mundo con tanta fluidez, que parecen flotar por encima de los escollos de la realidad.
Sigo creyéndolo, con un sentimiento de liberación sin fronteras, y aun que ella no lo sepa, parece que ese es mi papel en la vida de el...

Ser... Su almohada de noche..

La almohada que guarda sus sueños y los revive en sus recuerdos cuando el descansa.

Almohada de madrugada... Ni siquiera huele a mariguana.


Su almohada....



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